Aspectos legales de la oferta de bienes y servicios online
El comercio electrónico a través sitios on-line o de aplicaciones y redes como WhatsApp, Facebook, YouTube o Instagram, se han visto exponencialmente incrementado en las últimas semanas. Si bien muchas empresas uruguayas operan desde hace tiempo a través de Internet, el COVID-19 ha provocado que otras que no lo hacían hayan debido desarrollar el e-commerce rápidamente ante la necesidad de mantener su negocio activo, especialmente en la modalidad B2C (“Business to Consumers” o comercio entre empresas y consumidores).
Uno de los grandes desafíos de los proveedores online es lograr la confianza de sus clientes y esta confianza descansa principalmente en el cumplimiento del deber de informar y actuar de buena fe en todas las etapas de la transacción.
Quienes consumen por Internet no suelen ser una audiencia pasiva; generalmente tienen la posibilidad y además quieren dar su opinión. Las valoraciones se viralizan rápidamente y los comentarios de líderes de opinión o “influencers” pueden potenciar las ventas o perjudicar la reputación de una marca o de un proveedor en poco tiempo. De ahí que la ventaja de vender online con alcance masivo, las 24 horas del día, todos los días del año, exige a los proveedores el compromiso de utilizar esta modalidad de comercialización cumpliendo ciertos estándares y en especial ajustándose a la normativa vigente.
En nuestro país las ventas realizadas a través de Internet en la modalidad B2C, se encuentran alcanzadas por las normas que regulan las relaciones de consumo, entre otras, y por tanto deben cumplir las exigencias establecidas por dichas normas.[1]
Nuestra normativa en materia de relaciones de consumo enumera los derechos básicos del consumidor y define a éste como todo el que adquiere o utiliza un producto o servicio como destinatario final en una relación de consumo o en función de ella. Se excluye de la definición de consumidor a quien integra los productos o servicios que adquiere en procesos productivos o los transforma o comercializa.
Los derechos de los consumidores tienen como contrapartida obligaciones y deberes a cargo de los proveedores[2] que deben ser cumplidos en todas las fases de la comercialización online.
A continuación, mencionamos algunos de dichos derechos.
La oferta de productos y servicios realizada a través de internet debe cumplir ciertos requisitos, algunos de ellos son:
En materia de relaciones de consumo, el incumplimiento a las normas vigentes puede traer aparejada la aplicación de sanciones, que pueden consistir en apercibimiento, multas, decomiso de mercadería o clausura hasta por 90 días e imposibilidad de contratar con el Estado hasta por un año.
Además de las mencionadas, existen otras disposiciones que rigen el comercio electrónico B2C como las referidos a la protección de datos personales, a derechos de propiedad intelectual y a la forma de tributación de esta modalidad de comercialización, que no siempre recibe un tratamiento alineado a la normativa vigente. El apartamiento a dichas normas podría también acarrear sanciones y responsabilidades en el ámbito civil, penal y tributario.
[1] Principalmente, pero no exclusivamente, Ley Nº 17.250 con sus posteriores modificaciones y Decreto reglamentario Nº 244/000.
[2] Proveedor es toda persona física o jurídica, nacional o extranjera, privada o pública, estatal o no estatal, que desarrolla de manera profesional actividades de producción, creación, construcción, transformación, montaje, importación, distribución y comercialización de productos o servicios en una relación de consumo.
[3] Algunas de estas medidas fueron dispuestas por los Decretos N° 93/020 y N° 94/020
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